Sinfonía
del Fauno
Etapa
II
572
Por:
Israel López Chiñas
Abogado
del diablo. Con un pie en el estribo, el gobernador
panista de Chihuahua Javier Corral, aprovechó la visita del presidente Andrés
Manuel López Obrador para la especie de agradecimiento por los apoyos que
recibió el estado; de paso colocó al huésped como testigo, a fin de llamar a la
oposición al residente de Palacio Nacional, confabuladores de intereses que
deberán de ser inteligentes y hacer un balance justo de la gestión
presidencial, para analizar los propósitos y objetivos que plantea el proyecto. El
mandatario chihuahuense, a quien solamente le resta entregar la gubernatura a
la albiazul María Eugenia Campos, la que le viene quitando el poder poco a
poco, se entendió con su discurso como entreguista y la manera de romper con
aliados de los partidos opositores al gobiernista Morena. Javier Corral no
resistió y se desató por protección al retirarse, o alianza con AMLO, o de
plano su “chapulineo”.
Lectura de ocasión. No es el primero de los más motivados con la ideología del partido conservador PAN, que cambie de bandera o se vaya al partido rojo marrón; Germán Martínez lo hizo en otro momento y no le ha ido nada mal, director del IMSS y legislador federal. Lo cierto es que Javier Corral está como agua para chocolate para presentar un frente al panismo de Marko Cortés, quien ya tiene a su patrón Ricardo Anaya al frente de los liderazgos blanquiazules adelantando mano para las presidenciales. La gran verdad, la lucha entre la oposición a AMLO está en proceso, y no se extrañe ver a Diego Sinhue Rodríguez contra sus cofrades o sus aliados en otro momento. Javier Corral se autorizó mechar los cartuchos de explosivos.
SESIÓN PARA CATATÓNICOS. Se abrió
sin decir aguas. Como queriendo pelear, o para mostrarle al panismo
estatal de qué lado masca la iguana, Miguel Márquez, el ex gobernador panista,
quien considera a Diego Sinhue Rodríguez su delfín, está obsesionado en
mostrase. Apareció primero apoyando los
abanderados del PAN a la presidencias municipales, posando para la foto
con su clásica sonrisa, amén de insistir en el control del partido conservador
en el territorio guanajuatense, aunque en el momento más oportuno para colocar
a los albiazules de Guanajuato en la lucha por la dirigencia nacional, negoció
para eludir la confrontación con Marko Cortés. No se descarta que Márquez (MMM)
le haga el coro al gobernador de Querétaro Francisco Domínguez. Por cierto
Miguel Márquez mostró su rostro a favor de Carlos Zamarripa para decir que es
“injusto” cargarle toda la culpa al fiscal de la inseguridad en el estado; pues
claro otro culpable es él, como Diego Sinhue Rodríguez, entre muchos. 3M debe
mucho, tiene pendiente el caso Oliva.
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