LA ELECCIÓN INTERNA EN EL PRI DE GUANAJUATO; ALEJANDRO LARA Y SANTIAGO GARCÍA. DECLINÓ EL FUNCIONARO DEL CEN
Por: Israel López Chiñas
El suicidio político. Pareciera normal que un buscador del poder, reconozca su debilidad frente a sus competidores, y decida por alguno de ellos: tan, tan. Sin embargo, esta escapada de Jaime Martínez Tapia del proceso interno del PRI, en el estado de Guanajuato, debido a su condición de funcionario en su instituto político, podría significar el fin de los esfuerzos del dirigente nacional César Camacho, de querer meter las manos o patas en una elección que está dando frutos. Los priistas están entendiendo la importancia de la competencia, incluso, en contra de su Jefe partidario.
La piedra en el zapato. La determinación del político que andaba buscando desde hace más de un año, la presidencia del Comité Directivo Estatal (CDE), sería en esa tesitura, una especie de libertad para un PRI local, vilipendiado por más de 20 años. Martínez Tapia, no cubrió algunos de los requisitos exigidos para competir en las internas del 2014; pero lo dejaron seguir seguramente para no hacer olas o no agraviar la centro, o porque no ganaría ni por default. Las campañas no se hacen de a grapa, se necesitan apoyos aún cuando sean cerradas, debieran revisar los gastos de Jaime.
Quién gana; quién pierde. Por regla general, quienes se benefician de las desgracias resultan los impulsores; pero en el caso Jaime Martínez, la declinación estaba cantada, era cosa de tiempo. Retirarse de la contienda para apoyar a Santiago García contra Alejandro Lara, no es un acto que en automático hiciera ganar al primero puesto que Jamapa, podría haber provocado la molestia de los consejeros que estaban a su favor. Esta conducta necesita al menos de este fin de semana para que madure y convide su potencial. El impacto en los medios informativos genera el gran riesgo de crear confusión. La salida por tanto, es moneda al aire.
SESIÓN PARA CATAÓNICOS. Face to face, lo mejor. Las puertas las están cerrando pues los gallos se preparan para su pelea. Por el momento los nubarrones empiezan a disiparse, pero como la dirigencia nacional tiene la onza, puede dejar pasar y dejar hacer, pero también de meter el freno para romper con las ilusiones. De momento la nave con la carga de deseos va, anunciando que hay contienda y que llegará al final, arrojando al ganador y el perdedor. Lo decidido por Jaime Martínez, subsecretario de elecciones del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, está mal hecho, no por apoya a Santiago García, sino porque en meses, fue la encarnación de su líder nacional, que no quería elecciones.
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