lunes, febrero 05, 2007

Radio Pasillo del 05 de Febrero de 2007

AJUSTAR LA POSICIÓN DE MÉXICO, EN EL ORDEN MUNDIAL, AL INTERÉS NACIONAL Y LA CARTA MAGNA Y NO A VENTAJAS DEL MANDATARIO



Por Israel López Chiñas



Es posible que la falta de definición de sus objetivos, para inscribirse de manera reciproca, en el Concierto de las Naciones, ha impedido que México se posesione como el líder natural de los países latinoamericanos -pues le resulta fácil alinearse a los Estados Unidos, mostrándose como su aliado confiable y dócil-, que ubicar al país en el ámbito de su pertenencia. Si bien es cierto que el territorio mexicano colinda con el país más poderoso del orbe, también es muy cierto que comparte intereses, cultura y dolencias con centro y sudamericanos. Es momento de rediseñar el plan de participación mundial.

En el aniversario noventa de la promulgación de la Carta Magna, el primer mandatario de la Nación todavía ajusta sus discursos a su muy particular interés de grupo y se olvida que la Constitución de 1917, es el plan maestro que el país ha delineado a lo largo de décadas para que su Estado, se plante ante las precarias condiciones internas y se conduzca, bajo el interés de la Nación, ante el exterior.

Cúmulo de buenas ideas de la razón, la Constitución de la República es, en el alma de sus artículos, recuerdo de larga historia de divisiones y afrentas a la soberanía nacional. La norma principal inmuniza la unidad, la democracia y la defensa de la soberanía con base en la autodeterminación, a partir del no intervencionismo. El respeto al derecho ajeno es la paz; para la derecha gobernante... de nuevo Benito Juárez.

El anterior liderazgo mexicano en América Latina y el respeto internacional de la diplomacia que ordena nuestra Constitución, y si las circunstancias de una nueva realidad mundial, llama a pensar en un cambio de estrategia, no se sujeta ello a la ocurrencia de quien funge como el Jefe de Estado, sino por sanción de la soberanía de la Federación y la República, Senado y diputación federal, alimentados, en la nueva realidad, por la opinión de los mexicanos.

Israel López Chiñas, quien todavía no alcanza a entender cómo se manejarían las tropas mexicanas dependiendo de fuerzas armadas de primer mundo, cree que el militar de nuestro país, no cuenta con la tecnología que requieren las guerras actuales ni la disciplina para ello, pero tampoco la razón para participar en un conflicto de esta envergadura, a menos que sea morir y matar para la riqueza de otros.

No hay comentarios.: