Sinfonía
del Fauno
Etapa
II
266
Por: Israel López Chiñas
El
acelere podría devastarlos. El dueto consolidado
entre el “Encargado” de la Presidencia de Venezuela, Juan Guaidó, y Donald Trump, presidente
de los Estados Unidos, encontró un revés importante al intentar tomar el “cielo
por asalto”, que el venezolano bautizó como la “Expulsión del Usurpador” Nicolás
Maduro. La respuesta de la comunidad internacional frente al “ataque” de los
opositores al presidente en funciones Maduro, fue llamar a las partes a la moderación y
negociación por la paz en el país; los miembros de la Unión Europea (UE) desde
el inició de las hostilidades pidió una “máxima moderación”, dejando en
claro que sólo puede haber salida política, pacífica y democrática a las múltiples
crisis que afronta ese país. Los apoyos para Juan Guaidó promovido por Trump, “casi
se diluyeron”.
A
la vanguardia de respuestas. Ante de esta ofensiva
de los opositores, que el presidente venezolano en funciones llamó intento de
golpe de Estado, sirvió al presidente de los Estados Unidos Donald Trump para “reiterar
el apoyo” de su país al pueblo de Venezuela. En ese escenario mundial, a
pesar de la división y polarización de las partes que se estaban consolidado a
favor de Guaidó o Maduro, casi se suprimió ahora cuando el total de
enfrentamientos recreó el gran riesgo de una guerra civil, ganando la petición de
negociación: “preciso el diálogo”. La operación lanzada por el encargado de la
presidencia, fue de una gran alarma, por un posible tsunami de sangre, debido
a la incidencia de fuerzas de las partes con militares de cada lado.
En
la antesala una candidatura. Unos cuantos días
sirvieron como parteaguas entre la movilización por la expulsión y una
propuesta de enviados del presidente Maduro a México con la intención de
encontrar un espacio para la negociación la paz en Venezuela. La semana pasada,
como se puede verifocar en las columnas políticas en territorio mexicano, la
embajada de venezolanos que buscan la salida pacífica a la crisis de su país,
externaron que van por nominación del mandatario mexicano. Además de que
nuestro país podría ser la sede de las reuniones por la paz negociada, uno de
los grupos enviados impulsa una iniciativa para proponer al
presidente Andrés Manuel López Obrador como su candidato a Premio Nobel de la Paz,
pues no intervino en el conflicto de su país a pesar de las críticas que
recibiera. La idea emergió en el marco de la crisis migratoria de México.
SESIÓN PARA CATATÓNICOS. Ni
chinos ni acelerados. En el Palacio Nacional de la República Mexicana guardaron
hoy el silencio cómplice, pues han enarbolado la salida negociada al conflicto
venezolano. El Presidente Andrés Manuel López Obrador y su equipo especializado en la
cuestión internacional, adelantaron desde el acceso al poder, que no jugarían
el juego perverso de la polarización política de buenos contra malos que el
presidente Donald Trump diseñó, al que se habían inscrito los gobiernos de
muchos países. La línea de AMLO, le generó una especie de preferencia hacia
Maduro, que hizo que varios gobiernos interesados en esa cuestión pidieran a México una definición.
Nada alteró
la posición de López Obrador, quien gracias a esa determinación, fue
puesto por los venezolanos en la mira para ser promovido la candidatura para el
Premio Nobel de la Paz
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