¡HUELE A GAS…! DE LA TORRE DE PEMEX Y DEL EDIFICIO DEL PAN EN GUANAJUATO, SE LANZAN LOS JUICIOS DESESPERADOS DE LOS POLÍTICOS
Por: Israel López Chiñas
La honradez; primero. Es plausible que los políticos confíen a la población su decisión de acudir a los expertos antes de aventurarse a formular una hipótesis por más creíble que esta sea. Un evento como en la Torre Pemex, requiere del estudio científico para informar a la población con autoridad moral, dejando atrás toda actitud derivada de prejuicios ideológicos para que al final no se ofrezca una postura política sobre una explosión que arrojó 37 muertos, heridos y damnificados. La misma autoridad moral, le faltó a los diputados federales del PAN de Guanajuato, voceros de Márquez que le han exigido a Peña, chamba para políticos blanquiazules desempleados.
Huele gas; sí. Los órganos del Estado descienden a la misma calidad del “delincuente” y provocan reacciones inesperadas cuando a la trompa talega o pensando en la posición política dejan a un lado las investigaciones que podrían ofrecer los elementos básicos del suceso, como pasó con Jesús Murillo, Procurador de la República, quien teniendo a sus peritos para las explicaciones no los quiso adelantar. Es posible que por la experiencia, más adelante y con apoyo de la autoridad, los sean informantes, tomando en cuenta que el destinatario es el pueblo y cuyo objetivo es mantenerlo informado para que las hipótesis que se conformen, no sean puestas bajo sospecha.
El aviso oportuno. Lo asumido por el gobierno federal sobre la causa de la explosión en la Torre de la paraestatal Pemex, “gas en el sótano”, resulta por ende el avance porque quedan de manifiestas las calidades de las personas que han emitido los peritajes; sin embargo, lo esencialmente importante es el anuncio de que los científicos tendrán lugar en el desarrollo nacional. Si la apuesta del sexenio de Enrique Peña Nieto, es aprovechar la producción científica y tecnológica, entonces, es necesario que fluyan los recursos e impongan los estudios.
SESIÓN PARA CATATÓNICOS. La réplica desesperada. Quiénes son los más aptos para ejercer los cargos públicos, lo vienen decidiendo los partidos políticos que muchas veces han puesto a elegir a los ciudadanos, no de entre los mejores sino de entre los menos malos. Por eso y porque los políticos no deben despertar enconos ni provocar los escarnios ya que muchas veces los juicios contra el adversario se les regresan en forma de boomerang, sería mejor que Miguel Márquez solicite directamente algunas delegaciones federales a Peña, para los panistas que resultaron desempleados y le reclaman al gobernador de Guanajuato, un lugar en su administración.
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martes, febrero 05, 2013
Sinfonía del Fauno MCCCLVI
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