Sinfonía
del Fauno
Etapa
II
530
Por: Israel López Chiñas
Más
allá de aplausos. El personal encargado de la salud de
los mexicanos que no ha sido vacunado contra el COVID-19, lo mismo del sector
público que del privado, ha “levantado” la voz para exigir el antígeno que les ofreció
el gobierno de la República, pero han sido marginados. Antes de cerrar
el 2020, Amnistía Internacional había reportado que México sumó más
trabajadores de salud contagiados y muertos por el virus que los Estado Unidos
y Reino Unido. Sobrevino la especie de reacción de parte de la Federación que
aprovechó el escenario para anunciar que serían primeros en recibir el
medicamento con base al Proyecto Nacional de Vacunación, pero después de la semana
de inoculación masiva a los adultos mayores, los primeros de la lista no fueron
atendidos. En las manifestaciones en los tres últimos días en León,
trabajadores de las instancias públicas exigen sus dosis, a la par lo hace el
personal privado.
Únicamente
para resonar. El problema del personal médico, no sólo
es que sean contagiados, enfermen o les acontezca la fatalidad, sino podrían
contagiar a sus familiares, como se conoce desde el inicio de la pandemia hace
casi un año. En el orden mundial se viene comunicado sobre la perdida de
profesionales de la salud en nuestro país. Pero, las autoridades federal y
estatal, han decidido aplaudirles por su trabajo como el riesgo de estar
curando enfermos contagiados de coronavirus, a responder con seguridad en el
trabajo, mejores salarios, prestaciones, sólo con diplomas y toque de silencio
están reconociendo a quienes en cualquiera que sea su “centro de resistencia” está
en riesgo. Desde el principio, hace casi un año, el personal médico se viene
manifestando porque no cuenta con equipo apropiado, ahora no los vacunan a
pesar de estar atentos a todos los enfermos.
SESIÓN PARA CATATÓNICOS. La
línea imperceptible. El personal de diversas especialidades que
trabajan en la salud, ha señalado a la autoridad federal que les falta
vacunarlos, pues en donde trabajan tienen el primer contacto con pacientes que
pudieran contagiarlos. El miércoles pasado en la municipio de León,los trabajadores
de la clínica 48 del IMSS, denunciaron que ninguno de los mil 600 había sido
inoculado; el jueves los enfermeros de la Clínica T-1 del IMSS,se manifestaron
para señalar que tampoco han recibido el biológico a pesar de estar en la
“primera línea” con enfermos de COVID-19. Este viernes, en la Unidad Médica Alta Especialidad No 1 personal
de salud se expresó nuevamente para reclamar ser vacunados. Los dos sectores
esperan respuesta de AMLO en fin de semana.
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